Tareas semana (21) del 08 al 12 de enero
Tarea para el martes 09 de enero
Imprimir la biografía de Sor Juana Inés de la Cruz.
Tarea para el viernes 12 de enero
Ensayo impreso con formato APA sobre tema libre en el que incluyan los aspectos estructurales revisados en clase.
Debe adjuntar rúbrica de evaluación engrapada y sin folder.
Levar impresa una biografía de un personaje de su preferencia.
Sor Juana Inés de la Cruz
(Juana Inés de Asbaje y Ramírez; San Miguel de
Nepantla, actual México, 1651 - Ciudad de México, id., 1695) Escritora
mexicana, la mayor figura de las letras hispanoamericanas del siglo XVII. La
influencia del barroco español, visible en su producción lírica y dramática, no
llegó a oscurecer la profunda originalidad de su obra. Su espíritu inquieto y
su afán de saber la llevaron a enfrentarse con los convencionalismos de su
tiempo, que no veía con buenos ojos que una mujer manifestara curiosidad
intelectual e independencia de pensamiento.
Biografía
Niña prodigio, aprendió a leer y escribir a los
tres años, y a los ocho escribió su primera loa. En 1659 se trasladó con su
familia a la capital mexicana. Admirada por su talento y precocidad, a los
catorce fue dama de honor de Leonor Carreto, esposa del virrey Antonio
Sebastián de Toledo. Apadrinada por los marqueses de Mancera, brilló en la
corte virreinal de Nueva España por su erudición, su viva inteligencia y su
habilidad versificadora.
Sor Juana Inés de la Cruz
Sor Juana Inés de la Cruz
Pese a la fama de que gozaba, en 1667 ingresó en un
convento de las carmelitas descalzas de México y permaneció en él cuatro meses,
al cabo de los cuales lo abandonó por problemas de salud. Dos años más tarde
entró en un convento de la Orden de San Jerónimo, esta vez definitivamente.
Dada su escasa vocación religiosa, parece que Sor Juana Inés de la Cruz
prefirió el convento al matrimonio para seguir gozando de sus aficiones
intelectuales: «Vivir sola... no tener ocupación alguna obligatoria que
embarazase la libertad de mi estudio, ni rumor de comunidad que impidiese el
sosegado silencio de mis libros», escribió.
Su celda se convirtió en punto de reunión de poetas
e intelectuales, como Carlos de Sigüenza y Góngora, pariente y admirador del
poeta cordobés Luis de Góngora (cuya obra introdujo en el virreinato), y
también del nuevo virrey, Tomás Antonio de la Cerda, marqués de la Laguna, y de
su esposa, Luisa Manrique de Lara, condesa de Paredes, con quien le unió una
profunda amistad. En su celda también llevó a cabo experimentos científicos,
reunió una nutrida biblioteca, compuso obras musicales y escribió una extensa
obra que abarcó diferentes géneros, desde la poesía y el teatro (en los que se
aprecia, respectivamente, la influencia de Luis de Góngora y Calderón
de la Barca), hasta opúsculos filosóficos y estudios musicales.
Perdida gran parte de esta obra, entre los escritos
en prosa que se han conservado cabe señalar la Respuesta
a Sor Filotea de la Cruz. El obispo de Puebla, Manuel Fernández de
la Cruz, había publicado en 1690 una obra de Sor Juana Inés, la Carta athenagórica, en la que la religiosa hacía una
dura crítica al «sermón del Mandato» del jesuita portugués António Vieira sobre
las «finezas de Cristo». Pero el obispo había añadido a la obra una «Carta de
Sor Filotea de la Cruz», es decir, un texto escrito por él mismo bajo ese
pseudónimo en el que, aun reconociendo el talento de Sor Juana Inés, le
recomendaba que se dedicara a la vida monástica, más acorde con su condición de
monja y mujer, antes que a la reflexión teológica, ejercicio reservado a los
hombres.
En la Respuesta a Sor Filotea de la
Cruz (es decir, al obispo de Puebla), Sor Juana Inés de la Cruz
da cuenta de su vida y reivindica el derecho de las mujeres al aprendizaje,
pues el conocimiento «no sólo les es lícito, sino muy provechoso». La Respuesta es además una bella muestra de su prosa
y contiene abundantes datos biográficos, a través de los cuales podemos
concretar muchos rasgos psicológicos de la ilustre religiosa. Pero, a pesar de
la contundencia de su réplica, la crítica del obispo de Puebla la afectó
profundamente; tanto que, poco después, Sor Juana Inés de la Cruz vendió su
biblioteca y todo cuanto poseía, destinó lo obtenido a beneficencia y se
consagró por completo a la vida religiosa.
Firma autógrafa de Sor Juana
Murió mientras ayudaba a sus compañeras enfermas
durante la epidemia de cólera que asoló México en el año 1695. La poesía del
Barroco alcanzó con ella su momento culminante, y al mismo tiempo introdujo
elementos analíticos y reflexivos que anticipaban a los poetas de la
Ilustración del siglo XVIII. Sus obras completas se publicaron en España en
tres volúmenes: Inundación castálida de la única poetisa, musa
décima, Sor Juana Inés de la Cruz (1689), Segundo volumen de las obras de Sor Juana Inés de la Cruz (1692)
y Fama y obras póstumas del Fénix de México (1700),
con una biografía del jesuita P. Calleja.
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